Tomar Conciencia

Si cada uno barriera delante de su puerta, ¡qué limpia estaría la ciudad!

Proverbio ruso

Hace unas horas en un corto debate de ideas con la periodista Guadalupe Lizárraga el tema era que si son responsabilidad de la sociedad los problemas nacionales o que son únicamente responsabilidad  de los políticos. Este es el punto que ella impulsaba.

Pienso que los problemas no se dan por naturaleza espontanea, que tienen un origen y que ubicar ese nos permitirá comprender mejor sus componentes y dará información para resolverlos.

En un debate es imposible exponer un punto de vista por eso expondré mi punto de vista en este espacio.

Las causas y los síntomas de los problemas rara vez se hallan cerca en el tiempo de acuerdo a Peter Senge,  por lo que no hallaremos el origen de la situación del país en un periodo corto, cuando mucho podremos ver síntomas de mayor descomposición porque se cicla de manera viciosa el proceso.

México nace con un problema grave cómo país, no hay experiencia de gobierno entre los triunfadores de la independencia y se heredan todos los vicios y corrupción provenientes del gobierno peninsular.

México tenía una población mayoritariamente analfabeta, hecho que prevaleció hasta entrado el siglo XX, esto alejaba de la vida política activa a millones de personas, acostumbradas a que otros decidieran por ellos, y a no participar en las decisiones importantes de sus comunidades.

Cuando estos comenzaron a incorporarse al mundo moderno, recibieron un México en el que la corrupción era parte del sistema de vida, y la costumbre de no participar estaba fuertemente arraigada en la población hasta la tercera parte del siglo XX, y esto era tan real, que para poder controlar al país se crearon las grandes centrales obreras y campesinas, convirtiéndolas en fuerza que producía poder en los lideres, como hasta la actualidad sucede con los grandes sindicatos donde los grandes beneficiados son sus líderes.

A nadie le va mal durante mucho tiempo sin que él mismo tenga la culpa.

Michel Eyquem de Montaigne (1533-1592) Escritor y filósofo francés.

Millones de mexicanos están acostumbrados a estirar la mano, a pedir al gobierno, a realizar plantones y recurrir al chantaje antes que trabajar, porque saben que en México el trabajo raramente produce riqueza al empleado.

Millones de mexicanos se han aprovechado por décadas cuando un familiar llega a un puesto clave en el gobierno para beneficiarse, y millones de mexicanos tenemos alguien cerca, sea hermano, amigos, compadre que estando en el gobierno haciendo dinero ilícito guardamos silencio.

Millones damos mordida por no ser infraccionados, conducimos sin licencia, no cumplimos con las normas de sanidad en nuestros negocios, le llevamos la botella al director del colegio para que admita al hijo, y ponemos un sistema para robarnos la luz.

Millones hacemos trampa en las verificaciones vehiculares, copiamos en los exámenes, no pagamos el autobús o no devolvemos un cambio mal dado.

Muchos mexicanos se comen los alimentos en el supermercado sin pagar, otros por juego se roban cosas, otros tantos permiten que sus hijos rayen paredes sin importar el daño que causan a los demás.

Otros más se adueñan de las calles, con sus talleres, sus negocios de comida, o simplemente suben sus autos a las banquetas.

Muchos serían los ejemplos, pero ¿Cuál es la relación entre los políticos corruptos y la forma del ser del mexicano? Que es el mismo sistema en esencia la impunidad ante la violación de las leyes o las normas de convivencia.

El verdadero buscador crece y aprende, y descubre que siempre es el principal responsable de lo que sucede.

Jorge Bucay (1949-?) Escritor y psicoterapeuta argentino.

En las empresas el comportamiento no es otro, miles de jefes que usan el puesto para pedir favores sexuales, para hacer negocios ilícitos, para someter y sobajar a los de abajo, para crear cotos de poder y cerrar el acceso a los que no son sus amigos, miles de empresas están cerradas para personas que no pertenecen a los grupos de ejecutivos que sin demostrar efectividad van de empresa a empresa ocupando grandes puestos, cobrando grandes cifras, porque tienen la “experiencia” igual que pasa en el mundo político.

¿Se trata de resignarnos a tener malos políticos? La respuesta es no, pero se trata de reconocer en ellos los mismos males que aquejan el condominio, la colonia, la escuela, el trabajo y la casa.

¿Debemos callar? No, de ninguna manera, debemos denunciar, pero también tenemos que reconocer que los caminos de la denuncia no es sólo la crítica estéril, ofensiva, cómoda, y generadora de violencia.

Es mostrar qué ese político no es fiable, que no es honesto, hacer listas y formular quejas a los partidos, el mundo actual nos da herramientas para que millones de mexicanos conozcan a cada político, su trayectoria, y la clase de persona qué es, una sola convocatoria en twiter puede detener a un partido político a postular a una persona.

Pero no se hace un trabajo inteligente y planificado, donde primero la persona debe comenzar los cambios para transformar la casa, la escuela, el trabajo, la colonia, la ciudad y el país, todo es afectado.

Yo no creo en la disputa por disputar, por calentar, eso no informa porque no muestra el impacto y no da más salidas que boicots, marchas, desnudos y cosas inútiles.

Cuando se despierta el interés de las personas por investigar, pensar, analizar y proponer las cosas son diferentes, pero cuando se busca “denunciar” ante una corte formada por personas que reciben una parte de la verdad, cuando son parciales por tendencias políticas orientadas más por simpatía que por información verídica y confiable.

Finalmente mi YO CREO es que todos somos responsables, porque un divulgador social, que ignora que la corrupción, las malas costumbres y de educación son las mayores limitantes para que un país cambie, y que los políticos son el resultado de esa forma de educación que poco a poco comienza a cambiar y que alguien que se precie de ser un comunicador de altura debe ayudar a encauzar por caminos que generen progreso y paz y no confrontación y violencia.

México te quiero en PAZ